Cómo fomentar el ahorro y la inversión en los niños

En la niñez se aprenden los valores y principios que acompañan a las personas durante toda la vida. Los padres, la familia, la escuela, conocidos e inclusive algunas amistades forman un juicio sobre el individuo. Los hábitos alimenticios, el estudio, hacer ejercicio, convertirse en buenos ciudadanos y trabajar arduamente son algunos de los temas más enseñados, dejando de lado la educación financiera. Hoy, en este post te diremos cómo fomentar el ahorro y la inversión en los niños.

¿Cómo hablarles de temas financieros a los más pequeños?

La educación financiera de los niños empieza en casa. Existen múltiples estudios que aseguran que los niños imitan a sus padres, es decir, si tú vives con deudas es probable que heredes esa práctica a tus hijos y así sucesivamente, creando una cadena de mala salud financiera en la familia. Si quieres impactar en el futuro financiero de tus hijos, más vale que empieces a crear en ellos una buena relación con el dinero para que en unos años puedan hacer su primera inversión. Hacerlo no tiene que ser complicado. A continuación, te compartimos pequeñas actividades que puedes realizar para ilustrar el proceso del ahorro y la inversión de una manera fácil y sencilla.
 

Explícales la importancia del ahorro

Dales a conocer a tus hijos que un factor que deben de tomar en cuenta al ahorrar es, además de la meta, el tiempo. Ayúdalo a escribir en una hoja la cantidad que necesita y cuánto le tomará alcanzarla (de acuerdo a su paga por el trabajo que le asignaste realizar). Pégala en su cuarto e incítalo a ir revisando su avance periódicamente. Explícale que además de ahorrar, existe otro mecanismo para alcanzar sus objetivos: la inversión.

Enséñales el mundo de las finanzas personales

Lo segundo es demostrarles para qué sirve el dinero. Para ello, plantea un objetivo (diferente para cada hijo): ¿qué quieren en este momento? por ejemplo, una bicicleta. Llévalo a la tienda y permítele que pregunte y evalúe el precio. Después, en casa hagan un plan de ahorro (que después pueden convertir en un plan de inversión).

Ayúdales a estar prevenidos financieramente

Antes de pasar al tema de las inversiones, recuerda que parte importante de tener una óptima educación financiera como adulto, es el contar con un fondo de emergencia. Para que tu hijo lo comprenda puedes preguntarle qué pasará si una vez que se compre la bicicleta se le poncha una llanta: ¿tendrá cómo repararla? Habla con él y dile que además del ahorro para comprarla necesita tener un fondo de emergencia que le permita solventar ese tipo de gastos, por lo que parte de su sueldo debe ir destinado allí. Suma este rubro a su plan.

Muéstrales el poder de invertir su dinero

Como mencionamos anteriormente, además del ahorro, enséñale que existe otra manera de lograr objetivo: invertir. Para hacerlo ilustrativo, dale la opción de hacer una inversión cada que reciba su sueldo. Por cada peso que el meta en el “banco” (puedes utilizar un frasco), obtendrá 50 centavos a la semana. Explícale que al que su dinero genere más dinero por invertirlo se le llama rendimiento y pregúntale si le gustaría invertir más, pero adviértele que una de las características de un inversionista es la paciencia, pues tendrá que dejar sus ahorros invertidos durante un plazo (tiempo) para que den fruto.

Ayuda a hacer de México un país de inversionistas

Realizar la actividad puede ilustrar de manera sencilla para los niños cómo funciona el mundo de las inversiones. Fomentar la educación financiera en los pequeños tendrá un impacto positivo en su futuro. En México sólo el 15% de la población ahorra de manera formal, lo que quiere decir que en caso de que se presente una emergencia podrían verse obligados a recurrir a opciones, como la tarjeta de crédito, que puedan comprometer su bienestar económico aún más. 

¿Cómo es el de inverión en México. 

P​​​or cada mil personas de la Población Económicamente Activa (PEA), alrededor de 4 invierten en la Bolsa Mexicana de Valores (de acuerdo a datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores). Enseñarles desde hoy puede convertir a tus hijos en los próximos inversionistas que impacten en el futuro económico del país pues propicia que haya más crecimiento, más desarrollo y más empleo. Para hacerlo es primordial desarrollar el hábito del ahorro desde pequeños. Si como adulto inculcas al niño la importancia del valor del dinero y el concepto del ahorro, le darás una herramienta sumamente valiosa que lo ayudará durante toda su vida y evitará que caiga en malas prácticas financieras. 

Tú decides qué tipo de futuro quieres incentivar en tus hijos. Como padre, o tutor, eres responsable de su formación. Recuerda que tu ejemplo es un excelente maestro. Si tienes buenos hábitos financieros tus hijos los adoptarán más fácilmente.